Con el transcurso de los años la concepción clásica que yo tenía del ARTE se ve constantemente bombardeada por distintas manifestaciones que le sume a uno en una vorágine intelectual borrosa.
Y, ¿a qué viene esto? Pues es una reflexión lanzada desde la estupefacción que me ha producido el descubrimiento del artista que os muestro a continuación.
David Catá es un joven artista gallego que, como no, está ganando popularidad en internet principalmente gracias a una serie de fotografías que ha titulado muy ingeniosamente A flor de piel. En ellas aparecen retratos de su familia y allegados bordados a mano en la palma de sus propias manos, y luego arranca los hilos para que podamos ver las marcas que esas personas importantes de su vida han dejado en él. «Sus vidas se han entretejido con la mía para construir mi historia», explica, «que finalizará cuando me quede sin hojas donde dibujar.»
Ante la visión detenida de estas fotografías mi pensamiento oscila en varias direcciones. Por un lado reconozco y alabo la fuerza y la profundidad de la idea, me subyuga... Luego viene la parte técnica, David es listo, sólo pasa el hilo por la epidermis, que no sangra y no duele mucho. Él sabe que cuando sangra o le duele mucho es que se ha pasado con la profundidad de la puntada y ha llegado a la dermis. Por último, y desde el respeto, éste cerebro retorcido que poseo no puede evitar imaginar una serie de situaciones llamémoslas cómicas, ¿me explico? Sin entrar en detalles, me refiero a situaciones como la masturbación, propia y ajena, o las caricias... haciendo partícipe a toda la familia!!!! :p
Os dejo el link a la página del artista por si queréis explorar un poco más. Es este
No hay comentarios:
Publicar un comentario